Después de que se notificara que la hinchada del Cali podía ingresar al partido de ayer contra Deportivo Independiente Medellín en Palmaseca, juego que se disputó a las 6:00 pm por los cuartos de final de Liga Águila 2017-I, el presidente del Deportivo Cali, Álvaro Martínez, decidió citar a rueda de prensa para hablar sobre el levantamiento parcial que impuso la comisión del campeonato y la cual fue ratificada por Dimayor.
Inicialmente, el presidente agradeció a quienes enviaron comentarios felicitando por su gestión, pero manifestó su disgusto con quienes dicen que hay desigualdad respecto al otro equipo de la ciudad (América de Cali). Recordemos que el miércoles, el equipo rojo no pudo jugar con hinchada en el Pascual Guerrero, lo cual generó incomodidad y malos comentarios al respecto. Para aclarar la situación, Martínez explicó que el año pasado, motivo del partido Cali-Bucaramanga, inicialmente el estadio del Cali iba a ser prácticamente cerrado por la alcaldía de Palmira, pero él hizo la gestión y afortunadamente con unos compromisos, logró que el estadio se encuentre funcionando normalmente. Seis meses después de dicho acto, hizo una gestión similar con lo ocurrido en el clásico pasado.
Martínez quería que el clásico se aplazara y no aceptaron.
El presidente aseguró que fue avisado previamente del riesgo que había al realizar el partido y él pretendía aplazarlo: “Nosotros, para contar los hechos como pasaron, digamos que el pasado lunes me llamó personalmente el secretario de seguridad de la alcaldía a eso de las 6:00 pm, a decirme que la situación en Cali estaba complicada (martes y miércoles), que yo qué decía de suspender el partido”. Martínez afirmó que llamó al presidente del América, Tulio Gómez, para comentarle lo que estaba pasando: “Don Tulio me dijo que le parecía bien, que él ya le había dicho a la alcaldía, entiendo que sí, pero que iba a averiguar con su técnico, y después, como lo reconoció el propio alcalde, pues al técnico no le pareció, le pareció que debía jugarse el partido el miércoles y así se hizo. Infortunadamente conocemos los hechos que ocurrieron”.
A pesar de esto, Martínez seguía insistiendo con el aplazamiento del juego y se comunicó con el presidente de Dimayor, Jorge Perdomo: “Personalmente llamé al presidente de la Dimayor, al doctor Perdomo a comentarle, a decirle que nosotros veíamos ese tema muy caliente, que por favor trataramos de aplazar el partido”. Todo esto fue expuesto como argumentos que pusieron ante la comisión de apelación, teniendo en cuenta que ya habían perdido la reposición del día martes con la comisión del campeonato.
Gestión impecable de Álvaro Martínez y César Pinzón ante la comisión de apelación.
El presidente agradeció al doctor César Pinzón, quien es el asesor, pues con los datos y tips que le dieron, defendió jurídicamente la posición del club y logró un resultado positivo. Martínez comentó que adicionalmente, hablaron de la cantidad de tiempo que ha pasado desde que Palmaseca no ha recibido alguna sanción: “En el estadio del Deportivo Cali, la última vez que nos sancionaron el estadio fue hace exactamente dos años, cuando fuimos campeón en la final con el DIM, de resto las barras estaban totalmente controladas”.
Sobre los disturbios que hubo en el último clásico, el presidente explicó que infortunadamente una vez terminó el partido, algunos miembros de los de la barra del América no abandonaron inmediatamente el estadio, tal como era el compromiso, y así las cosas, lo cual se ve en los videos, estas personas se pasaron a oriental, donde había gente totalmente desprotegida; la gente de la tribuna se tiró a la cancha y ya en ese momento, según los videos, lo cual el presidente no justifica, las barras del Deportivo Cali también invadieron la cancha: “El origen de los hechos no fue ocasionado por nuestras barras”.
Nuevo control biométrico que reforzará la seguridad en el estadio.
Álvaro Martínez, resaltó que desde mayo 9 firmaron un contrato para el estadio del Deportivo Cali, de un control biométrico para las entradas. Inicialmente tenía un costo de $1.600.000.000, sin embargo decidieron sumarle las cámaras de seguridad: “Hace ocho días, prácticamente cerramos ese contrato, también porque va a incluir unas cámaras en la tribuna de sur, para un total de $1.800.000.000”. Este contrato fue presentado ayer a la comisión y también sirvió como argumento, ya que “se ve que el Deportivo Cali ha hecho esfuerzos, que a veces hay temas que no se pueden controlar, pero que está detrás de los esfuerzos para mejorar la seguridad de los estadios”, argumentó el presidente.
Martínez también recalcó las medidas preventivas de seguridad que tienen en el estadio: “En nuestro estadio no hay barras visitantes, eso ayuda, eso merma el riesgo y nuestro estadio no ha sido sancionado en los últimos dos años porque hay control sobre las barras”.
En caso de que la violencia en las barras se siguiera presentando, dijo que: “Si desafortunadamente por las buenas como nos gusta a nosotros, no se puede, habrá que hacerlo infortunadamente por las malas y habría que, en caso de que ocurran disturbios en nuestro estadio, pues cerrar simplemente las tribunas populares, que no quisiéramos hacerlo y que sería la última medida que tomáramos”.
El presidente, quien está próximo a terminar su gestión, habló del plazo que tienen para implementar la tecnología de seguridad en el estadio: “Esos aparatos de control de entrada y la parte biométrica deben estar listos, según nos dicen, para la primera, máximo segunda semana de octubre y tocarían los dos últimos partidos, que digamos tienen cierto riesgo, del todos contra todos del próximo semestre, que serían América y Nacional en Cali, nosotros recuerden terminamos en Bogotá, entonces para esos dos partidos ya estarían instalados estos controles biométricos”.
Deportivo Cali se destaca por su liderazgo para acabar con la violencia en los estadios.
Finalmente, Martínez destacó el liderazgo que ha tenido el club para estas medidas, pues aunque Dimayor habló hace un tiempo de implementar estos controles en los estadios de Barranquilla, Medellín, Bogotá y Cali, Deportivo Cali decidió hacerlo de una vez: “Nosotros salimos un poco adelante, ya hicimos la primera gran inversión y faltaría un segundo impulso, que ya son las cámaras en el resto de las tribunas, porque en este primer impulso las cámaras no van a estar instaladas sino en la tribuna sur”. Agregó que él no le encuentra problema a las barras, sino a quienes van a causar problemas: “Las barras no son malas, son buenas, son bonitas, hay el espectáculo, lo malo son los violentos que se filtran en las barras”.
Redactado por:
Valentina Clavijo