La reunión se realizó con el fin de lograr la aceptación de todas las categorías que conforman la AFA, ya que la idea es que el mismo protocolo sirva para todos. Aunque parece difícil por las exigencias de este, han buscado hacerlo sencillo y fácil de aplicar. Todo esto teniendo en cuenta que el virus y la información que se tiene de él ha ido cambiando desde marzo por lo que el protocolo también.
Villani, comentó en medios argentinos, que los protocolos que se han elaborado y aplicado en Europa tienen costos muy elevados lo que las hace estar muy alejados de la realidad del fútbol y la economía argentina. Por ejemplo, en el viejo continente hacen tests cada 48 o 72 horas a más o menos 60 personas y se basan en la llegada al entrenamiento en carro. Esto es casi imposible de lograr en el país sudamericano.
Se plantea testear 72 horas antes de arrancar, en el momento de empezar y después una vez a la semana. Eso sí, se debe tener un seguimiento de todos los integrantes del equipo por si surge algún síntoma para hacer hisopado familiar. Cada test cuesta alrededor de 6.000 pesos argentinos (más o menos 80 dólares) y se le debe realizar a un estimado de 65 personas, esto elevaría la suma a casi 5.000 USD por cada día de pruebas.
No todos los clubes, ni siquiera de primera división, pueden costear la realización de tantas muestras. La financiación todavía es el tema más difícil para solucionar por los dirigentes, la AFA y el gobierno.
El traslado de los deportistas también es un tema muy importante ya que no todos cuentan con la facilidad de movilizarse en sus propios autos. Para este punto, durante la reunión se elaboró un protocolo de traslado seguro que será puerta a puerta hasta el entrenamiento.
El bus será higienizado, se testeará la temperatura de todos antes de subirse al vehículo, este contará con dispensador y rociador de alcohol. Al interior deberá haber distanciamiento, no habrá servicio de comidas, comidas o baños.
Además, siendo optimistas la fecha tentativa para el reinicio de los entrenamientos es a mediados de agosto. Se estiman seis semanas de preparación para volver a la competencia y así esperar a que se acabe el invierno. Aun así, no hay fecha concreta y la incertidumbre sigue reinando.
Ahora bien, ¿cómo van a llegar los jugadores a competir después de cinco meses entrenando en casa – o departamento – si solo tienen un mes y medio para ponerse a punto? O peor aún, ¿cómo van a estar para el comienzo de las competencias CONMEBOL que fueron ratificadas para septiembre?
Los protocolos hay que hacerlos y que sean ajustables a la realidad de Argentina, pero también hay que tener en cuenta que los clubes tienen necesidades distintas. Los que están en competencias internacionales, tendrán que pensar en los viajes y contacto con equipos de otros países – si se llega a concluir la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana –. Los equipos que compiten por Copa Argentina tendrán contacto entre sí, hay provincias en mejores condiciones que otras en relación al COVID-19. Son muchos detalles que se deben ajustar para que la vuelta del fútbol sea de la manera más segura posible.
Corresponsal desde Argentina
Ana Caicedo Hinojos
En Twitter: @anitacaicedoh95
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