Luciendo el cinturón del monarca de los superpluma del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Óscar Valdez regresa al ring con la ilusión de convertirse en el segundo pugilista mexicano en lograr unificar un campeonato. Tras la hazaña en la categoría de supermedianos de su compatriota y líder de equipo Saúl “Canelo” Álvarez, quien derrotó a Caleb Plant en noviembre de 2021.
“Quiero que mi nombre esté al lado de los grandes campeones mexicanos, y esta es la clase de pelea que me puede poner ahí”, aseguró el púgil de Nogares, Sonora en los días previos a la prueba más trascendental de su carrera.
Valdez de 31 años, arriba al enfrentamiento de esta noche con 30 peleas ganadas, 23 nocauts y ninguna derrota. Su última contienda tuvo lugar el 10 de septiembre del año pasado, cuando derrotó al brasileño Robson Conceicao por decisión unánime.
A pesar de esto, las predicciones no están para nada a su favor, pues el estadounidense Shakur Stevenson arriba con todo el favoritismo en las casas de apuestas y es considerado por los especialistas como el nuevo Floyd Mayweather.
“Soy el mejor boxeador joven del mundo y me convertiré en el campeón unificado”, afirmó el medallista de plata de peso gallo en los Juegos de Río-2016 en la antesala de la pelea que seguramente lo catapultará como una de las grandes joyas del boxeo estadounidense.
No en vano, los números del norteamericano también son perfectos. El vigente campeón de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) exhibe una marca de 17 triunfos, 9 de ellos por nocauts y ninguna derrota. Su último combate se dio el 23 de octubre del 2021, cuando noqueó al también estadounidense Jamel Herring.
El vencedor de esta pelea se establecerá como el principal superpluma de la actualidad y podría acceder a la unificación con los campeones de otros organismos, como lo son: Roger Gutiérrez, de la Asociación Mundial de Boxeo, y Kenichi Ogawa, de la Federación Internacional de Boxeo.
Por Julio Maya
Periodista con énfasis en deportes
En Twitter: @JulioMaya26