Si a vos te gusta el fútbol sabés que en cualquier momento te tocará ser testigo de algo poético, lirico, cómico, triste, angustiante, enojoso o simplemente histórico. Porque el fútbol es así, un compendio de situaciones que hacen que tu corazón palpite y tu alma se llene.
Y en ese marco, podés tener la capacidad para admirar, gustar o no gustar con un estilo u otro, calificar con subjetividad y aceptar (si tu ego lo permite) que no hay verdad revelada ni tampoco alguien que sea dueño de la misma. Es fútbol, es de todos y para todos.
Deportivo Cali viene ganando, goleando y hasta ahí, porque no a todos les ha gustado el equipo de Pelusso. ¿Y qué le vamos a hacer?
Obvio que la sensibilidad te invita a llevarle a la retina algo más bonito, ese fútbol de suspiros, de jugaditas, de irreverencia y despliegues de talento. Ese que la hinchada celebra con “olé” en la cancha y con memes en las redes. Ese que te lleva querer replicar en los picaditos y que, al final, como meter millones de hinchas en la tribuna, no te suma en la tabla si no se da el resultado. Jugaste muy bonito, pero no jugaste bien.
Entonces los periodistas, haciendo su trabajo, cuestionan a Don Gerardo por el estilo y “la tenencia” y Don Gerardo, a mi juicio dentro de lo que cabe en un camerino y una rueda de prensa, interpreta las preguntas y contesta con la tranquilidad directa de quien sabe lo que hace. Lo hizo, sí, lo que quedó consignado como sendas “peinadas” y no porque los periodistas no sepan de fútbol, seguramente saben más que muchos (incluido yo), sino porque preguntaron por aquello a lo que el profe no responde.
No es soberbio o introvertido, no, pero tiene invicta la casa, con el arco en cero en cuatro partidos y 10 goles anotados. ¿Vale la pena pensar en la tenencia o en el juego bonito? Es decir, ¿vas a una pescadería a pedir lomo de res? Viejo, el resultado es el que cuenta y más en el Deportivo Cali con una hinchada que, en su gran mayoría, primero mira la tabla y luego el corazón.
Don Gerardo les recordó que en el último gol ante Rionegro el equipo tuvo el balón por 20 toques y que una jugada que salió de área propia terminó en anotación por eso mismo, tenencia. ¿Y ahí qué podés decir? Celebremos, abracémonos y vayámonos acostumbrando a eso, al estilo de Pelusso con un equipo corto, práctico, seguro y que si debe renunciar a la pelota lo hará con tal de ganar en orden sin perder, ojalá, la contundencia.
Soy hincha del Deportivo Cali hace más de 35 años. Vi el Cali bonito, el no tan bonito, el de las vacas flacas, el de las vacas azucaradas gordas y el de ahora. Los vi haciendo gambetas y túneles, los vi levantando paredes, dominando la bola por horas, pero los vi campeones cuando a eso, en la justa medida, le agregaron concentración, orden, seguridad y huevos, muchos huevos.
No jugamos bonito, seguro, pero con la actitud renovada, la unión, la sangre inyectada y los huevos es muy seguro que sigamos jugando bien que, para efectos de la estadística, es lo que cuenta.
Vamos a seguir ganando, todos, los hinchas con los resultados de los muchachos y los periodistas en esta escuela que se llama “Gerardo Pelusso”.
Nos vemos en el estadio, nos leemos por acá
Germán Salcedo Cajiao
En Twitter: @Germanchos
